Entrecot con salsa a la pimienta receta fácil

Se acerca San Valentín y no todo serán corazones y fresas ¿verdad? ¿Qué os parece preparar un segundo plato sencillo y contundente recurriendo a un entrecot? Es una carne que resulta muy jugosa y tierna y si la acompañamos de una salsa casera, el éxito está asegurado.

Las salsas para acompañar carnes son muy buena solución cuando tenemos poco tiempo para cocinar, o, simplemente no somos unos cocinillas. Prepararlas cuesta apenas unos minutos y  nos permiten dar un toque de sabor cuando presentamos una carne a la plancha. El plato que os presento hoy es muy sencillo de preparar y, a la vez, muy resultón. Así que para aquéllos que les gusta agasajar a sus invitados y no pasarse horas cocinando, ésta será una buena solución.

Empezamos preparando la salsa. En una sartén con un poco de aceite, freímos  los granos de pimienta. Añadir la crema de leche, un poco de sal y un poco de pimienta negra molida. Cuando haya reducido, agregamos el queso  hasta que se funda. Ya sólo queda poner en una salsera y servir. La presentamos en una salsera en la mesa y que cada uno se sirva a su gusto.

 Para los entrecots, calentaremos aceite en una sartén o plancha y, cuando esté bien caliente, marcaremos los entrecots, primero de un lado y luego del otro. Hay que hacerlo a fuego fuerte para que no se cueza en su propia agua. Una vez tostada la superficie de ambas caras, emplatamos, aderezamos con sal y servimos. Hay que hacerlos justo en el momento de servir porque si se enfría y recalentamos, el plato pierde toda su gracia. QUÉ APROVECHE!
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